Catastrófico el asunto maestro, una lacerante realidad. En este momento reenvio. Buenas noches!!
Asunto: La Montaña
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La Montaña
1º DE MAYO, POBREZA Y MÁS POBREZA
Oscar Loza Ochoa
Lo deseable no es cultivar el respeto por la ley, sino por la justicia.
Henry David Thoreau
Una palabra basta para calificar la administración del país en los últimos 32 años: fracaso. ¿Cómo llamar de otra manera una gestión pública que condena al 54% de los niños y adolescentes a la pobreza? ¡Vaya día del niño que les regalamos a los 22 millones que conforman ese porcentaje de menores mexicanos! Y con su realidad de pobres también les dejamos el triste mensaje de que no pueden hacerse muchas ilusiones sobre su futuro si se atienen al mundo que se construye por los que detentan el poder. Las cifras de la violencia hablan claro en este terreno: en muertes violentas de personas entre 15 y 17 años de edad, en 2010 se lamentaban 14.4% por cada 100 mil habitantes y para 2013 el porcentaje se elevó a los 15.7% por la cantidad de referencia mencionada.
Para los padres de esos menores de 18 años y frente al día internacional de los trabajadores, las cuentas no pueden ser más pesimistas. Las políticas públicas han abierto de par en par las puertas de la economía nacional a las compañías transnacionales y modificado las leyes en beneficio de éstas, haciendo polvo el salario de los trabajadores, al grado que en este 2014 -de acuerdo a la UNAM y a la Iberoamericana- los ingresos de los trabajadores han alcanzado el punto más crítico en casi cuatro décadas, contraviniendo el artículo 123 de la Constitución. En los últimos 25 años el salario perdió capacidad adquisitiva en un 76%, reflejándose negativamente a la hora de comprar la canasta básica para una familia de cuatro miembros: adquirirla hoy cuesta casi 193 pesos diarios, el equivalente a 5 mil 563 mensuales; pero no lo es todo. Los trabajadores requieren gastar en vivienda, transporte, escuela, etc), lo que reclama un gasto de unos 9 mil 881 pesos mensuales. En pocas palabras, un salario decoroso para los trabajadores debe andar por los 16 mil 444 pesos mensuales, de acuerdo a la Facultad de Economía de la UNAM.
La tragedia del salario mínimo se manifiesta en lo que dejó de comprarse al empequeñecerse, por ejemplo, en tres décadas. En 2012 su caída fue equivalente a 46 kilos de tortillas, 243 piezas de pan, 5.6 kilos de huevo y 9.5 kilos de frijol. Hasta el INEGI reconoce que si en 1987 13 millones de mexicanos requerían 4.5 horas de trabajo para comprar los alimentos de la canasta básica diaria, para 2011 las horas de trabajo necesarias se habían elevado a más de 48.
Y si hablamos de prestaciones para los trabajadores, carecen de seguridad social el 65.6% de la población ocupada. La Organización Internacional del Trabajo (OIT) califica esos empleos como indecentes. Aún sin modificarse las leyes laborales la práctica ha sido no permitir nuevos sindicatos y desplazar las direcciones sindicales que habían mostrado combatividad, con lo que se perdió poder de negociación de los trabajadores y se incrementó el porcentaje de trabajadores sin protección gremial. De acuerdo al Colegio de México, en 2005 el 16.7% de la población económicamente activa (PEA) estaba sindicalizada, para el año 2010 había caído al 14.5%. La contrarreforma laboral de 2013, si no hay una revitalización del movimiento sindical, barrerá con lo que queda de conquistas sindicales. Si el salario mínimo cayó el 68.4% entre 1980 y 2009, la existencia de los sindicatos y contratos colectivos no pudo evitar una caída del 50.5% de los salarios más protegidos del país.
Pero, qué tal les fue a los banqueros. Al cierre de 2013 no cabían de júbilo, pues las ganancias alcanzaron los 107 mil millones de pesos, 24% más que en 2012. La economía mexicana apenas creció al 1.3% el año pasado, pero los bancos elevaron esa cifra en 18 veces. Sus ganancias -dicen los académicos de la Ibero- fueron obscenas. Y no les falta razón si tomamos en cuenta que la tasa de desempleo oficial es del 5.7% (la UNAM la ubica en más del 24%). Si le esculcamos un poco más a los bancos que concentran esas ganancias, encontramos que cinco (BBVA Bancomer, Banamex, Santander, Banorte e Inbursa) acapararon 90 mil 533 millones de pesos.
Al digerir al menos una buena parte de esta información, la Comisión Económica Para América Latina (CEPAL) ha considerado que México es uno de los países que puede presentar problemas de fuertes conflictos sociales en este 2014, pues nuestros salarios y la desigualdad social se ubican entre los peores de América Latina . Ese mismo análisis debe estar en los escritorios y en las manos de quienes dirigen la Nación. Ellos tienen conciencia plena que las contrarreformas a la Constitución y una modificación negativa mayor a la legislación secundaria empeoran las cosas, por eso están dando el paso más reciente en comisiones del Congreso de la Unión aprobando la iniciativa de ley que otorga al presidente facultades extraordinarias para promover declaratorias de Estado de excepción (suspensión de garantías) en lugares o zonas donde a su juicio los conflictos se conviertan en problema para la seguridad del Estado. Varias organizaciones de la sociedad han denunciado esta pretendida legislación como la criminalización de la protesta social. Y si no vuelve a mostrarse el músculo que a través de las redes y la movilización se demostró en días anteriores, ese ominoso dictamen será una realidad demasiada costosa para una sociedad acostumbrada a los espacios tradicionales para ejercer el derecho de petición y de reclamo social contra las medidas que lastiman los derechos ciudadanos y la débil democracia en que vivimos. Cuando el mundo se nos viene encima no es posible continuar cruzados de brazos. Vale.
www.oscarloza.com
oscarloza.ochoa@hotmail.com
Twitter @Oscar_Loza
Enviado desde mi iPad
1º DE MAYO, POBREZA Y MÁS POBREZA
Oscar Loza Ochoa
Lo deseable no es cultivar el respeto por la ley, sino por la justicia.
Henry David Thoreau
Una palabra basta para calificar la administración del país en los últimos 32 años: fracaso. ¿Cómo llamar de otra manera una gestión pública que condena al 54% de los niños y adolescentes a la pobreza? ¡Vaya día del niño que les regalamos a los 22 millones que conforman ese porcentaje de menores mexicanos! Y con su realidad de pobres también les dejamos el triste mensaje de que no pueden hacerse muchas ilusiones sobre su futuro si se atienen al mundo que se construye por los que detentan el poder. Las cifras de la violencia hablan claro en este terreno: en muertes violentas de personas entre 15 y 17 años de edad, en 2010 se lamentaban 14.4% por cada 100 mil habitantes y para 2013 el porcentaje se elevó a los 15.7% por la cantidad de referencia mencionada.
Para los padres de esos menores de 18 años y frente al día internacional de los trabajadores, las cuentas no pueden ser más pesimistas. Las políticas públicas han abierto de par en par las puertas de la economía nacional a las compañías transnacionales y modificado las leyes en beneficio de éstas, haciendo polvo el salario de los trabajadores, al grado que en este 2014 -de acuerdo a la UNAM y a la Iberoamericana- los ingresos de los trabajadores han alcanzado el punto más crítico en casi cuatro décadas, contraviniendo el artículo 123 de la Constitución. En los últimos 25 años el salario perdió capacidad adquisitiva en un 76%, reflejándose negativamente a la hora de comprar la canasta básica para una familia de cuatro miembros: adquirirla hoy cuesta casi 193 pesos diarios, el equivalente a 5 mil 563 mensuales; pero no lo es todo. Los trabajadores requieren gastar en vivienda, transporte, escuela, etc), lo que reclama un gasto de unos 9 mil 881 pesos mensuales. En pocas palabras, un salario decoroso para los trabajadores debe andar por los 16 mil 444 pesos mensuales, de acuerdo a la Facultad de Economía de la UNAM.
La tragedia del salario mínimo se manifiesta en lo que dejó de comprarse al empequeñecerse, por ejemplo, en tres décadas. En 2012 su caída fue equivalente a 46 kilos de tortillas, 243 piezas de pan, 5.6 kilos de huevo y 9.5 kilos de frijol. Hasta el INEGI reconoce que si en 1987 13 millones de mexicanos requerían 4.5 horas de trabajo para comprar los alimentos de la canasta básica diaria, para 2011 las horas de trabajo necesarias se habían elevado a más de 48.
Y si hablamos de prestaciones para los trabajadores, carecen de seguridad social el 65.6% de la población ocupada. La Organización Internacional del Trabajo (OIT) califica esos empleos como indecentes. Aún sin modificarse las leyes laborales la práctica ha sido no permitir nuevos sindicatos y desplazar las direcciones sindicales que habían mostrado combatividad, con lo que se perdió poder de negociación de los trabajadores y se incrementó el porcentaje de trabajadores sin protección gremial. De acuerdo al Colegio de México, en 2005 el 16.7% de la población económicamente activa (PEA) estaba sindicalizada, para el año 2010 había caído al 14.5%. La contrarreforma laboral de 2013, si no hay una revitalización del movimiento sindical, barrerá con lo que queda de conquistas sindicales. Si el salario mínimo cayó el 68.4% entre 1980 y 2009, la existencia de los sindicatos y contratos colectivos no pudo evitar una caída del 50.5% de los salarios más protegidos del país.
Pero, qué tal les fue a los banqueros. Al cierre de 2013 no cabían de júbilo, pues las ganancias alcanzaron los 107 mil millones de pesos, 24% más que en 2012. La economía mexicana apenas creció al 1.3% el año pasado, pero los bancos elevaron esa cifra en 18 veces. Sus ganancias -dicen los académicos de la Ibero- fueron obscenas. Y no les falta razón si tomamos en cuenta que la tasa de desempleo oficial es del 5.7% (la UNAM la ubica en más del 24%). Si le esculcamos un poco más a los bancos que concentran esas ganancias, encontramos que cinco (BBVA Bancomer, Banamex, Santander, Banorte e Inbursa) acapararon 90 mil 533 millones de pesos.
Al digerir al menos una buena parte de esta información, la Comisión Económica Para América Latina (CEPAL) ha considerado que México es uno de los países que puede presentar problemas de fuertes conflictos sociales en este 2014, pues nuestros salarios y la desigualdad social se ubican entre los peores de América Latina . Ese mismo análisis debe estar en los escritorios y en las manos de quienes dirigen la Nación. Ellos tienen conciencia plena que las contrarreformas a la Constitución y una modificación negativa mayor a la legislación secundaria empeoran las cosas, por eso están dando el paso más reciente en comisiones del Congreso de la Unión aprobando la iniciativa de ley que otorga al presidente facultades extraordinarias para promover declaratorias de Estado de excepción (suspensión de garantías) en lugares o zonas donde a su juicio los conflictos se conviertan en problema para la seguridad del Estado. Varias organizaciones de la sociedad han denunciado esta pretendida legislación como la criminalización de la protesta social. Y si no vuelve a mostrarse el músculo que a través de las redes y la movilización se demostró en días anteriores, ese ominoso dictamen será una realidad demasiada costosa para una sociedad acostumbrada a los espacios tradicionales para ejercer el derecho de petición y de reclamo social contra las medidas que lastiman los derechos ciudadanos y la débil democracia en que vivimos. Cuando el mundo se nos viene encima no es posible continuar cruzados de brazos. Vale.
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