lunes, 27 de abril de 2015

[Diariodeurgencia] ESPECIAL ARGENTINA: LA DERECHA PREDOMINA EN LAS ELECCIONES PRIMARIAS DE EN BUENOS AIRES /


27 DE ABRIL 2015
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BUENOS AIRES: UNA CIUDAD 
MAYORITARIAMENTE AMARILLA Y A LA DERECHA

Datos oficiales - 98,42% de mesas escrutadas

PRO - 47,34%
Horacio Rodríguez Larreta

60,01%

Horacio Rodríguez Larreta

Gabriela Michetti

39,99%

Gabriela Michetti

ECO - 22,26%
Martín Lousteau

80,08%

Martín Lousteau

Graciela Ocaña

18,61%

Graciela Ocaña

FPV - 18,72%
Mariano Recalde

65,62%

Mariano Recalde

Gabriela Cerruti

11,61%

Gabriela Cerruti

Fte. de Izquierda - 2,26%
Myriam Bregman

Myriam Bregman

Rodríguez Larreta y el PRO fueron los ganadores en las PASO en la ciudad de Buenos Aires

Una jornada de globos amarillos en ascenso

Rodríguez Larreta superó a Michetti y será el candidato a jefe de Gobierno del PRO, que superó el 47 por ciento de los votos. Lousteau, de ECO, y el kirchnerista Recalde serán sus rivales. En Neuquén, el MPN ganó la elección a gobernador.

Por Fernando Cibeira
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El jefe de Gobierno, Mauricio Macri, celebró el triunfo del PRO bailando con su hija Antonia sobre los hombros.

Mauricio Macri se anotó un triunfo doble en las PASO de la ciudad de Buenos Aires, un dato que el jefe de Gobierno esperaba con ansias para apuntalar su ambición presidencial. El PRO confirmó la hegemonía que mantiene en el distrito desde 2007, al quedar ayer como la fuerza más votada al superar el 47 por ciento de los votos. Además, el elegido por Macri para la sucesión, el jefe de Gabinete, Horacio Rodríguez Larreta, superó con una amplitud impensada a la senadora Gabriela Michetti, una pulseada que a priori se presentaba muy complicada. En tanto, la fuerza ECO –la UCR, el socialismo y la Coalición Cívica– quedó posicionada con el 22,2 por ciento como la principal fuerza opositora a caballito de la candidatura del economista Martín Lousteau, quien derrotó a Graciela Ocaña. En tanto, el tercer lugar con el 18,7 por ciento fue para el Frente para la Victoria, donde el presidente de Aerolíneas Argentinas, Mariano Recalde, superó holgadamente a sus adversarios internos. Ayer, también se eligió gobernador en Neuquén: resultó electo Omar Gutiérrez, el candidato del Movimiento Popular Neuquino (MPN), partido que gestiona la provincia desde hace más de medio siglo. Cerca quedó el postulante kirchnerista Ramón Rioseco y tercero, muy lejos, el radical Horacio "Pechi" Quiroga, a quien apoyaban Macri y Sergio Massa.


LA "FAMILIA FELIZ" DE LA DERECHA MACRISTA

Fue el debut de las primeras primarias abiertas para elegir candidatos locales en la Ciudad de Buenos Aires, un distrito que representa poco menos del 9 por ciento del padrón nacional. Los candidatos electos a jefe de gobierno, legisladores y comuneros disputarán la elección general el 5 de julio mientras que, de hacer falta, el ballotage entre los dos más votados se hará dos semana después. Fue la última elección con la boleta tradicional porque a partir de la próxima se utilizará el voto electrónico, sistema que abre interrogantes. Anoche, a la vieja usanza, el escrutinio fue lento y la página web para seguir el recuento comenzó a funcionar recién pasadas las 23.

Tal vez porque se trató de las PASO –aunque pareció que también se debió a las características de los candidatos–, los mensajes de anoche fueron breves y repletos de agradecimientos y sucintos eslóganes de campaña. "Esta transformación recién empieza. Hay que llevarla a todo el país", celebró Macri en otra estudiada puesta en escena del PRO en Costa Salguero. La primera en salir fue la perdidosa Gabriela Michetti, que dejó de lado los cruces que caracterizaron la contienda con su archirrival para alinearse con la estrategia nacional del macrismo. Felicitó a Rodríguez Larreta y subrayó la necesidad de apoyar a Macri para la presidencia. En el escenario la siguió el ganador, menos dotado aún que el jefe de Gobierno para la sonrisa y el baile. "El mensaje de cambio", machacó Rodríguez Larreta que era el sentido de su triunfo. "El equipo", claro, otro latiguillo amarillo. Casi que se podía escuchar a su gurú ecuatoriano Jaime Durán Barba pedirles que hablaran de cambio y de equipos.

Como las estrellas, Macri se guardó el cierre. "Era un día muy especial", arrancó acerca del desafío que planteaba la elección. El jefe de Gobierno se jugó una carta brava al bancar a Rodríguez Larreta, quien al inicio aparecía en las encuestas bastante atrás que su rival. El jefe de Gobierno porteño utilizó el escenario como trampolín para lanzarse a la presidencia. "Quiero decirles algo de corazón: no tengamos miedo, podemos vivir mejor", lanzó antes de consabido baile, esta vez con su hija Antonia sobre los hombros.

Neuquén

Obviamente, lo de Neuquén no fue mencionado en el bunker del PRO porque hubiera agriado el clima de globos, papelitos y Tan Biónica. El resultado volvió a poner de manifiesto las dificultades de Macri para trasladar votos fuera de la General Paz. Escrutadas más de la mitad de las mesas, Gutiérrez, el candidato del MPN elegido por el gobernador Jorge Sapag, se imponía con el 35,45 por ciento de los votos, contra el postulante del Frente para la Victoria, Ramón Rioseco, intendente de Cultral-Có, que se acercaba al 30 por ciento. A 10 puntos quedaba Pechi Quiroga, un radical que armó una alianza con el PRO y que hizo campaña en la provincia junto a Macri. También tuvo el apoyo de Massa, quien ayer pasó una jornada electoral negra y no se lo vio por ninguna parte.

Los que siguen

Los boca de urna revelaron temprano el triunfo del PRO y Rodríguez Larreta. La atención pasó entonces a la pelea por el segundo lugar. En el búnker del Frente para la Victoria en el hotel NH la militancia del kirchnerismo cantaba a la espera de los resultados mientras funcionarios y candidatos pasaban ante los micrófonos resaltando la buena actuación en un distrito siempre esquivo. El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, aseguró que el FpV se había quedado con el segundo lugar. Al rato, desde Palermo, Elisa Carrió y Ernesto Sanz salieron a responderle. "Lo siento por Aníbal, Lousteau está consolidado en el segundo lugar", celebró Lilita.

Antes de que salieran los primeros cómputos, el economista confirmó el anticipo desde el Palais Rouge. Prometió "discutir en forma respetuosa pero firmemente" en la campaña que le queda por delante. Lousteau cuadruplicó los votos que sacó Ocaña en la interna.

El último de los candidatos en aparecer en escena fue Mariano Recalde. En el lugar de reunión del FpV no sólo estuvieron los varios precandidatos que participaron de la interna –Gabriela Cerruti, Aníbal Ibarra, Carlos Heller y Gustavo López– sino también los precandidatos presidenciales Daniel Scioli, Florencio Randazzo, Sergio Urribarri y Agustín Rossi. Todos en un clima de gran cordialidad. Recalde ganó en la interna con más del 65 por ciento de los votos, contra el 11 de Cerruti y el 10 de Ibarra. "La gran mayoría de los porteños quiere que se construya una alternativa que gobierne la ciudad para todos, donde cada uno viva en un barrio integrado y se terminen las villas y asentamientos", sostuvo en su discurso, el único de los candidatos que se explayó. Aseguró que buscará entrar en el ballottage el 5 de julio y ganar en la segunda vuelta del 19.

Además de estas tres fuerzas, dos agrupaciones de izquierda lograban superar el piso para competir en la general. Una, el Frente de Izquierda (FIT) que propone a Myriam Bregman como candidata a jefa de Gobierno. El FIT lleva varias elecciones destacables en el distrito. Otra, Autodeterminación y Libertad, la fuerza de Luis Zamora, quien casi sin hacer campaña volvió a mostrar que mantiene una pequeña porción del electorado cautiva. En tanto, en el frente Camino Popular seguro había superado el piso para la lista de legisladores mientras que Claudio Lozano peleaba por unas décimas que lo habilitaran por la Jefatura de Gobierno. La última palabra la tendría el escrutinio final.

Por lo tanto, en total, serán cinco o a lo sumo seis candidatos a jefe de Gobierno de la Ciudad. Hubo precandidatos presidenciales que hicieron sapo con sus protegidos. El elegido por Massa, el economista Guillermo Nielsen, ni siquiera alcanzó el 1 por ciento. El frente Surgen que apoyó Margarita Stolbizer armó una primaria entre Humberto Tumini y Sergio Abrevaya que no sumó ni medio punto. El actor Ivo Cutzarida –un adalid de la mano dura bendecido por el puntano Adolfo Rodríguez Saá– quedó lejos de convertirse en la sorpresa que había prometido, lo mismo que el legislador Gustavo Vera, quien se promociona por su relación con el papa Francisco e hizo su cierre de campaña junto a Pino Solanas. Ninguno de los dos alcanzó a llegar al 1 por ciento.


Los favoritos, los locales

Por Mario Wainfeld
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El PRO ganó en forma rotunda las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias porteñas (PASO). Para el jefe de Gobierno Mauricio Macri fue redoblona porque su candidato, el jefe de Gabinete Horacio Rodríguez Larreta, superó con comodidad a la senadora Gabriela Michetti. El Movimiento Popular Neuquino (MPN) venía ganando las elecciones en la provincia que hegemoniza ininterrumpidamente desde 1983. Ambos eran favoritos en la previa y en el historial.

La condición de local gravita mucho en las elecciones distritales, regla que se pone en juego a cada competencia. Ayer se venía confirmando. Esta nota se cierra pasada la medianoche del domingo con escrutinios parciales: 85,88 por ciento de las mesas porteñas y 65,31 de las neuquinas. Las tendencias parecían firmes, pero se aclara que se trabaja con esos datos.

Las conclusiones más precisas podrán darse en el diario de mañana, hoy iremos insinuando las más evidentes a la espera de los números definitivos.


La CABA es fiel: El macrismo viene prevaleciendo desde 2007, con pocos tropiezos, en las votaciones en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA). Ayer ratificó la primacía marcando una diferencia grande con sus adversarios, rondando el 47 por ciento de los votos emitidos que consiguió en la primera vuelta para jefe de Gobierno en 2011.

La interna entre Rodríguez Larreta y Michetti fue un de- safío de ésta que disgustó a "Mauricio", quien se jugó entero por su favorito. "Horacio" es menos carismático que "Gabriela", menos mimado por el electorado... en realidad nunca fue candidato antes. Lo fortificó el apoyo del líder de la fuerza, sumado a un despliegue territorial, mediático y de recursos materiales formidable en la campaña. Fueron eficaces, por un margen superior al insinuado por las encuestas que acertaron con la tendencia.

Las PASO no son las generales que se librarán el 5 de julio. Hay quien imagina que podría haber fuga de los votos de quienes acompañaron a Michetti. Los precedentes de años anteriores, la capacidad de imantar que tienen los éxitos y el ojímetro del cronista suponen que lo más posible es que PRO retenga las adhesiones, en grandes números. Su favoritismo para seguir al frente de la CABA, entonces, es altísimo.

La dirigencia de color amarillo festejó a su modo, bailando como en un cumple. También se ilusiona con llegar a gestionar otra de las grandes provincias argentinas, Santa Fe. Miguel Del Sel acarició esa posibilidad hace cuatro años y, aunque se ignora el resultado exacto de las PASO de esa provincia, el resultado que obtuvo los autoriza a soñar con el doblete.

Si se amplía la mirada a otros territorios, las perspectivas son menos promisorias y muy desparejas. Sobre eso será mejor discurrir en días venideros.


Sin espacio para cuartos: La coalición Energía Ciudadana Organizada (ECO) y el Frente para la Victoria (FpV) disputaron el segundo y tercer puesto. Lo consiguió ECO lo que no fue batacazo aunque sí una sorpresa. Ambas coaliciones dirimieron sus candidaturas en internas que terminaron con vencedores amplios.

Las tres fuerzas que llegaron a un desparejo podio polarizaron a casi todo el padrón, dejando poco margen para la surtida oferta alternativa. Varios de los postulantes quedaron en riesgo de no superar el uno y medio por ciento de los votos emitidos necesario para entrar a la elección de autoridades. Al cierre de esta nota sólo parecen haberlo logrado el Frente de Izquierda y los Trabajadores y Autodeterminación y Libertad, el partido del ex diputado Luis Zamora.

Habrá menos boletas partidarias en el cuarto oscuro en julio. Las PASO organizan las preferencias: alertan a los microemprendimientos u organizaciones sin convocatoria. Es un buen método, sobre todo porque el piso exigido es transigente.

El aspirante de ECO, Martín Lousteau, congregó una apreciable cantidad de votos y dejó de lado fácilmente (en su caso no cabe decir "sin despeinarse") a la diputada Graciela Ocaña. Los radicales y la Coalición Cívica los avalaron, aunque no son "del palo".

La diputada Elisa Carrió y el senador Ernesto Sanz se entusiasmaron frente al micrófono. Fueron los primeros dirigentes en tomar la palabra, una vez terminadas las horas de veda. Llegaron antes que los del PRO, que saben manejarse en esos trances.

Prometieron que llegarían al ballottage y ganarían: no parece sencillo. Pero sí les vale lo acumulado. El rival de ECO, quedó claro, es el FpV, al que le dedicaron dardos y profecías.


Un suelo áspero: El FpV llegó con expectativas de salir segundo, con un piso de un veinte por ciento. Los números provisorios están por debajo, será tarea de campaña remontarlos tomando como referencia el 27 por ciento que consiguió Daniel Filmus en la primera vuelta de 2011. No luce simple, pero queda tiempo para arremangarse y caminar el territorio.

El kirchnerismo comenzó un ensayo interesante y exigente, en Mendoza y en la CABA. La Cámpora se expone en las urnas. En Mendoza lo hizo con un dirigente del FPV como primer candidato en una lista interna, en la Ciudad Mariano Recalde tuvo el apoyo de la Casa Rosada para ir por la Jefatura de Gobierno. En ambos casos, arriesgaron mucho, en contiendas difíciles de antemano.

El objetivo siempre es ganar, en principio. Pero la idea central es ir fogueando a una dirigencia joven para pedir el voto, disputarlo, mostrarse, darse a conocer. Y recibir los lauros o los golpes que supone toda competencia.

Recalde, junto al ministro Carlos Tomada, enfrentan ahora un reto durísimo: crecer lo que se pueda desde un piso que, ya se dijo, quedó debajo de las expectativas.


El MPN, todo un caso: El gobernador de Neuquén, Jorge Sapag, desdobló las elecciones provinciales, como tantos de sus colegas. Fue quien más las apuró, seguramente de modo excesivo. Los "gobernas" tratan de ubicar el momento que les es más propicio: pueden errarle pero gozan de una franquicia en sus terruños.

El Movimiento Popular Neuquino (MPN) es la fuerza provincial más exitosa de la Argentina, viene ganando ininterrumpidamente desde 1983. También aventajó al peronismo en 1973, se uno se retrotrae a tiempos que este escriba considera difíciles de comparar con la actualidad.

Omar Gutiérrez, ministro en el Gabinete de Sapag, fue su candidato y lo sucederá.

El FpV buscó no ser monocolor y llevó como adalid a Ramón Rioseco, un dirigente con formación de izquierda que fue piquetero durante la crisis de fin del siglo pasado y transitó desde las rutas hasta la intendencia de Cutral-Có.

No consignamos los porcentajes parciales. Sí recordamos que, cuatro años ha, el MPN le sacó poco más de 13 puntos porcentuales de ventaja al FpV.

El MPN sabe tallar en la política nacional, sacándole buen jugo a su elenco estable de senadores y diputados. Negocia, acuerda o tensa con cada uno de los sucesivos oficialismos nacionales que vio pasar. En los últimos años fue, mayormente, un buen "compañero de ruta" del gobierno de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner. Fueron tiempos auspiciosos para la provincia, con olor a gas y a petróleo. Sus ingresos mejoraron merced a la distribución de ingresos entre la Nación y las provincias hidrocarburíferas ulterior a la reestatización de YPF. Suma, a su vez, lo que ya está dinamizando Vaca Muerta.

El radical Horacio Quiroga fue el tercero en la disputa y en el score. Pechi Quiroga se alió con el macrismo y quedó atrás.


Análisis provisorio: Los victoriosos tienen derecho y motivos para festejar. Las extrapolaciones a lo nacional son parte de todos los debates. No se las puede ni debe evitar, procurando no ser facilista ni lineal.

El PRO y el MPN siguen dominando como locales, tal como lo hicieron desde que Cristina Kirchner es presidenta. Los electorados de los dos distritos son, por tradición que quebraron pocas veces, poco afectos al peronismo.

El éxito entusiasma, embellece y de alguna forma congrega. De cualquier modo ya se vio en 2007 y 2011 que el voto nacional no es idéntico al que se expresa en las elecciones locales.

Neuquén tiene gobierno hasta 2019. Cuatro distritos realizaron sus PASO. Dos parecen ir a una revalidación oficialista: Salta y la CABA. En Mendoza el radicalismo obtuvo una ventaja estimulante pero que no autoriza a dar por terminado el partido. En Santa Fe, los socialistas y el PRO están palo y palo, mientras el FpV tercia no tan lejos pero con dos rivales adelante.

Es prematuro sacar conclusiones generales, salvo la fidelidad de ciertos territorios (contamos tres) a sus oficialismos. Quizá espigando con más minucia se puedan detectar señales hacia las presidenciales de octubre.

Por ahora, queda el saldo de jornadas de participación bastante intensa, con el único lunar del escrutinio santafesino. El pésimo funcionamiento de la web electoral del gobierno porteño no es tan grave aunque sí una berretada que merece señalarse en tres líneas.

Horacio Rodríguez Larreta, el ganador en la interna del macrismo

Siempre con la proa hacia la derecha

Integró gobiernos peronistas y radicales. A falta de carisma, siguió al pie de la letra lo que le aconsejaron sus asesores.

Por Werner Pertot
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Horacio Rodríguez Larreta se recibió de economista en la UBA.


"Horacito, con esa cara nunca vas a ganar una elección." Santiago de Estrada no se andaba con vueltas. En las épocas en que el funcionario macrista conducía la Legislatura, le soltó esa frase a Horacio Rodríguez Larreta. Con el cariño de un padre, le explicó que él era muy bueno para los cargos ejecutivos, pero nunca iba a tener suerte en las urnas. Eran las épocas en las que en el PRO le decían "Pi", porque no superaba el 3,14 por ciento de intención de voto. Esa maldición se rompió ayer. Larreta les demostró a todos que también puede ganar en el terreno electoral y nada menos que a su eterna enemiga, Gabriela Michetti.

Hijo de una familia de alcurnia, su tío abuelo fue procurador general en los años treinta y convalidó la acordada de la Corte que legitimó el golpe del dictador Félix Uriburu contra Hipólito Yrigoyen. Su padre, Horacio Larreta Leloir, fue parte del Movimiento de Integración y Desarrollo (el fundador del desarrollismo, Rogelio Frigerio, fue el padrino de Larreta). En un casting armado por Macri para elegir a su sucesor en 2011, Larreta contó que él y sus hermanos tuvieron una relación difícil con su madre, que se divorció, y con su padre, que se casó con una mujer mucho más joven.

Se recibió de economista en la UBA e hizo cursos de Administración de Empresas en Harvard. Su primer empleo fue como analista financiero en la petrolera Esso.

Atravesó gobiernos peronistas y radicales, siempre con la proa puesta a la derecha. "Aunque Larreta suele sostener que sus trabajos en el Estado durante los gobiernos de Menem y De la Rúa cabían en la definición de 'técnicos', sus nombramientos se ligaron siempre a acuerdos políticos", detallan Gabriel Vommaro, Sergio Morresi y Alejandro Belloti, autores de Mundo PRO. Anatomía de un partido fabricado para ganar.

Larreta entró a la Gerencia de Inversiones Extranjeras del Ministerio de Economía, cuando lo conducía Domingo Cavallo. Luego saltó a la Anses, donde tuvo un doble contrato en 1996: uno por 27 mil pesos/dólares por seis meses de trabajo para "asesorar en la coordinación del diseño de los sistemas operativos" y otro por 39 mil pesos/dólares para "implementar todas las medidas que crea convenientes para el mejor aprovechamiento de los recursos humanos". Los contratos de lujo (más de 11 mil dólares por mes en 1995), firmados por el director ejecutivo Alejandro Bramer Markovich, fueron descubiertos por la Auditoría General de la Nación, y en la Anses debieron cambiar la modalidad por la que lo contrataban. Consultado por Página/12, Larreta no reconoció los documentos y dijo que "jamás fui acusado de tener un doble contrato".

Siguió como gerente general de la Anses hasta 1998, cuando saltó a la secretaría de Desarrollo Social del gobierno de Carlos Menem. Asumió como subsecretario de Políticas Sociales, segundo de Ramón "Palito" Ortega. Allí lo conoció a De Estrada. Luego fue a parar al directorio del Fondo Nacional de Capital Social (Foncap). De aquella época arrastra hasta hoy una causa judicial por presunta corrupción que impulsó el fiscal Guillermo Marijuan. Fue por el supuesto peculado en el préstamo de más de un millón de dólares a la Fundación Emprender para pagar deudas bancarias, un destino que no contemplaban los fondos del Foncap. Larreta fue llamado a indagatoria el 25 de noviembre de 2005, pero nunca se concretó. La Cámara Federal ratificó el mes pasado que debe continuar la investigación, pese a que el fiscal de Cámara, Germán Moldes, desistió de la apelación.

En la Alianza se reconvirtió: Fernando de la Rúa lo nombró interventor del PAMI entre 2000 y 2001, junto con Cecilia Felgueras y Angel Tonietto, cuñado de Graciela Fernández Meijide. De esa época surgen las acusaciones por la falta de pagos a la Fundación Favaloro, que Larreta niega enfáticamente. Acto seguido, Larreta fue funcionario duhaldista: lo nombraron presidente del Instituto de Previsión Social (IPS) durante el gobierno bonaerense de Carlos Ruckauf. También fue director de la DGI, a donde lo convocó Cavallo.

Por esa época, creó el Grupo Sophia, una de las clásicas fundaciones neoliberales, pero orientada a los problemas concretos. De allí salieron, por ejemplo, la actual vicejefa María Eugenia Vidal y la ministra de Desarrollo Social, Carolina Stanley. Fue compañero de fórmula de Macri en 2003, cuando fueron derrotados por Aníbal Ibarra. En esa época, lo presentaban como "el peronista Larreta" para darle un componente distinto al armado del entonces presidente de Boca. "Es el hombre que más estudió sobre el asistencialismo en la Argentina", lo ensalzaba Macri por ese entonces.

Larreta cuenta con un patrimonio de 12 millones de pesos, según sus últimas declaraciones juradas. Entre sus activos, hay empresas familiares dedicadas a la cría de ganado y a arrendar campos. En su cumpleaños cuarenta, organizado por su esposa la wedding planner Bárbara Diez en el Tortugas Country Club, estuvieron el empresario Marcelo Mindlin, el directivo del diario La Nación Fernán Saguier, además de Alfonso Prat-Gay, Diego Santilli y Michetti.

De un perfil extremadamente cuidado, Larreta se desbocó en plena campaña de 2011 cuando dijo sobre el progresismo: "Ellos fueron los que destruyeron la Ciudad. Que vengan todos, les vamos a romper el culo". Debió pedir disculpas y nunca volvió a cometer el mismo exabrupto.

Larreta no cuenta con el carisma natural de Michetti, pero siguió al pie de la letra el consejo de sus asesores. Si le pedían que se deje sombra de barba para mostrarse descontracturado, lo hacía. Si le recomendaban juntarse con vecinos, organizaba metódico una recorrida por semana por los barrios. Allí, estoico, escuchó quejas, críticas, recomendaciones y hasta insultos. "Hice miles en los últimos ocho años", contó durante esta campaña. Le rindió frutos. Esta victoria y las que seguirían no son el final del camino para Rodríguez Larreta. Lo ponen un paso más cerca del sueño que tiene desde que era un niño y que le repite a todo el mundo: quiere ser presidente.

Martín Lousteau se impuso en la interna de ECO y fue el opositor que más votos obtuvo

Con la expectativa de llegar al ballottage

El ex ministro de Economía derrotó ampliamente a Graciela Ocaña y Andrés Borthagaray. Su estrategia de ahora en más apuntará a captar parte de los votos que ayer fueron a Gabriela Michetti y a precandidatos opositores que quedaron fuera de competencia.

Por Sebastian Abrevaya
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Martín Lousteau festejó ayer junto a su compañero de fórmula, Fernando Sánchez, y a Roy Cortina, primer candidato a legislador.

"Olé olé, olé olá, ni con Larreta ni con los K, vamos con ECO a ganar la Capital", cantaban entusiasmados anoche los jóvenes radicales en el bunker de la alianza que integra la Coalición Cívica, la UCR, el socialismo –entre otros– y que lleva a Martín Lousteau como candidato a jefe de Gobierno. Fue una pequeña muestra del clima que se vivía pasadas las 9 de la noche, cuando ya anunciaban que el ex ministro de Economía se convertía en "el candidato opositor más votado" de las PASO. "Somos plenamente conscientes de que debemos honrar este compromiso y lo vamos a hacer por los que creyeron que es posible discutir respetuosa pero firmemente sin caer en ninguna falsa antinomia", aseguró Lousteau, 20 minutos antes de las 22. Un rato antes ya habían aparecido sobre el escenario del Palais Rouge Elisa Carrió y Ernesto Sanz, los precandidatos presidenciales de la CC y la UCR. "El 70 por ciento de la Ciudad votó por la República, los candidatos consolidados son el del PRO y Martín Lousteau", afirmó Carrió. "Hoy Martín Lousteau ha tenido piso pero no techo, el FpV en cambio ha tocado un techo que no va a poder pasar", completó Sanz. Para la foto final, arriba del escenario, estaban presentes el precandidato a vice, Fernando Sánchez; el primer candidato a legislador, Roy Cortina, y los dos derrotados de la primaria de ECO, Graciela Ocaña y Andrés Borthagaray, entre otros. Al cierre de esta edición, con el 67 por ciento de las mesas escrutadas, Martín Lousteau obtenía el 17,6 por ciento de los votos, Ocaña el 4,1 y Borthagaray 0,3. Al igual que en 2013, el bunker del barrio de Palermo fue escenario de festejos. Pero los actores políticos no fueron exactamente los mismos. Del extinto frente Unen quedaron afuera de la foto de ayer el GEN, Libres del Sur y Proyecto Sur, que tuvieron un muy flojo desempeño en el frente SurGen. Y anoche ECO acumulaba un 21,4 por ciento contra el 35 de las PASO de 2013. De todas maneras, la diferencia por encima del Frente para la Victoria y de su candidato ganador, Mariano Recalde, configuraban un escenario más que positivo para los dirigentes que se convocaron en el coqueto salón palermitano.

"Quiero agradecer especialmente a todos aquellos porteños que hoy con su voto nos dieron una enorme dosis de confianza", dijo Lousteau, que evitó dar precisiones sobre el destino de Ocaña y Borthagaray. Una de las alternativas que se barajaba es que la ex ministra de Salud se convierta en su candidata a vice, desplazando a Sánchez y tratando de asegurarse el acompañamiento del 4 por ciento de los votos que cosechó ayer. "ECO sabrá aprovechar las enormes capacidad y condiciones intachables" de ambos, aseguró el ex ministro de Economía. En su entorno aseguraban que a partir de ahora se profundizará el enfrentamiento con el macrismo, pero con la idea de capturar buena parte del 19 por ciento que sacó Gabriela Michetti. Con esa idea, y sin mencionar a la senadora, Lousteau pidió anoche que lo apoyen aquellos que compartan sus "prioridades y principios éticos". Fue una alusión a las apelaciones a la transparencia y los valores con los que Michetti trató de diferenciarse del jefe de Gabinete macrista.

"Estamos consolidando el cambio en la Nación. Recién arranca la campaña y Lousteau en el ballo- ttage va a estar ganando la Ciudad", aseguró anoche Carrió, leyendo los resultados en clave nacional. La chaqueña, socia de los radicales y de Mauricio Macri a nivel nacional, le envió sus felicitaciones al líder del PRO y a su candidato ganador en las PASO. A Michetti le envió un mensaje personal, en el que le aseguró que "se recibió de mujer política", a pesar de la derrota. La líder de la CC le pegó a Aníbal Fernández, quien minutos antes había dicho que el Frente para Victoria había recuperado el segundo lugar en la Ciudad.

También haciendo una lectura nacional, Sanz consideró que con la elección de Capital y la de Neuquén, sumadas a la de Santa Fe, Mendoza y Salta, se expresó el 25 por ciento de la población en condiciones de votar, y que en 3 de esos 5 distritos se impuso "la idea de cambio".

"No tengo dudas de que voy a discutir con el PRO en el ballottage", afirmó anoche Lousteau, en una entrevista al bajar del escenario. A diferencia del sistema electoral nacional, en la Ciudad para evitar una segunda vuelta es necesario obtener la mitad más uno de los votos, algo que ni Macri logró en sus dos elecciones pasadas. En ese contexto y con la diferencia por encima de Recalde, la estrategia está ahora depositada en captar gran parte del voto de Michetti y, también, en algún voto del FpV que prefiera una victoria del ex ministro de Economía antes que la continuidad del macrismo al frente de la jefatura de Gobierno. Además, dan por hecho que los votos del arco no kirchnerista y no macrista como el de Guillermo Nielsen del Frente Renovador y los ex socios Sergio Abrevaya y Humberto Tumini, de SurGen, terminarán acompañando a Lousteau.

Tanto Ocaña como Borthagaray se mostraron satisfechos por la elección, más allá de haber sido derrotados ampliamente por el ex ministro de Economía. "Hasta ahora estábamos compitiendo pero a partir de este momento estamos trabajando todos juntos", aseguró el arquitecto radical, apenas llegó al búnker de Palermo.

Antes de las 6 de la tarde los referentes de la Coalición Cívica y del radicalismo, fueron acercándose al bunker. Los datos de unas 124 mesas testigo fueron el único elemento para calmar la ansiedad ante la falta de resultados oficiales, que empezaron a caer a cuenta gotas alrededor de las 9 de la noche. Ya pasadas las 23, el escenario estaba claro y sólo les quedaba una gran sensación de satisfacción y optimismo. El desafío, reconocían anoche, será muy difícil.



Logró dos tercios de los votos del espacio K, con más de diez puntos sobre el segundo

Recalde, con un holgado triunfo en el FpV

El Frente para la Victoria mostró unidad y el ahora candidato a jefe de Gobierno habló pensando en la elección de julio. Fuerte presencia de presidenciables y candidatos a gobernador bonaerense.

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El escenario de anoche fue una foto de unidad detrás del ganador de la interna en el espacio K.

El peronismo llegaba ayer a las PASO porteñas con dos grandes objetivos. El primero era consolidarse como la segunda fuerza en la ciudad de Buenos Aires detrás del PRO. El segundo dar una imagen de unidad detrás de Mariano Recalde, el candidato elegido por la presidenta Cristina Fernández de Kirchner. Si bien el Frente para la Victoria quedó finalmente en tercer lugar y con una cosecha de votos menor a la esperada, la foto de unidad quedó plasmada ayer en el auditorio del hotel céntrico que funcionó como base. Allí estuvieron todos los precandidatos presidenciales del espacio, los principales aspirantes a la gobernación bonaerense y buena parte del gabinete nacional, respaldando al titular de Aerolíneas Argentinas, que se impuso con mayoría absoluta en la interna K. Anoche, con más del noventa por ciento de las mesas escrutadas, el FpV acumulaba el 18,75 por ciento de los votos. De esos, 12,3 correspondían a Recalde, que le sacó más de diez puntos de ventaja a su competidor más cercano, Gabriela Cerruti.

Eran casi las once de la noche cuando Recalde subió al escenario, camisa blanca y pantalón negro, sin saco ni corbata.

Por entonces, se conocían los demorados resultados oficiales, que dejaban al FpV con el bronce en el podio porteño. Aun así, el eje del discurso del candidato fue el trabajo de cara a las elecciones generales, que tendrán lugar el 5 de julio, donde se propuso "entrar al ballottage" para luego "ganar la ciudad para gobernarla" en una segunda vuelta. Para el dirigente de La Cámpora y el PJ local, "los porteños se expresaron por un cambio". El discurso fue moderado respecto de las expectativas manifestadas por otros dirigentes más temprano, cuando llegaban al bunker, pero terminó con una arenga firme que incluyó un guiño a los votantes de la precandidata derrotada del PRO, Gabriela Michetti.

Detrás suyo lo respaldaban los seis aspirantes a la candidatura que se quedaron por el camino: Cerruti, Aníbal Ibarra, Carlos Heller, Gustavo López, Carlos Oviedo y Víctor Ramos. Entre todos, según los datos escrutados anoche, sólo alcanzaron a sumar uno de cada tres votos kirchneristas, mientras que Recalde se quedó con los dos tercios restantes.

También se mezcló entre ellos el primer candidato a legislador, el ministro de Trabajo, Carlos Tomada. La audiencia estaba compuesta en partes iguales por dirigentes e invitados y militantes de base que desde temprano le pusieron ruido y color a la larga espera. En la vereda, varios cientos de ellos, con banderas de La Cámpora, el Movimiento Evita, el Peronismo Militante y Nuevo Encuentro, entre otras organizaciones, montaron guardia y celebraban cada vez que alguna figura entraba o salía del lugar.

A ellos se dirigió Recalde en buena parte de su discurso, en el que les agradeció el trabajo realizado durante la campaña y les transmitió "la certeza de que tarde o temprano va a haber un cambio" en la ciudad de Buenos Aires. "Tenemos tiempo, tenemos paciencia y tenemos las condiciones. Nuestro primer desafío era pasar las PASO, elegir un candidato, consolidar una fuerza política y mostrarle a la gente que hay alternativa", arengó. Luego los convocó a afrontar "una segunda etapa que va a empezar ahora" con miras a meterse en la segunda vuelta, que se disputará en diez semanas. Pero además, aseguró que el kirchnerismo "no es una fuerza testimonial" sino que "quiere entrar al ballottage para ganarlo" y poder "gobernar la ciudad" de Buenos Aires. "Ese es nuestro compromiso y nuestro desafío", apuntaló. Adentro del auditorio y en la vereda, donde había instalada una pantalla gigante y un poderoso sistema de audio, celebraron el convite ruidosamente.

Aun a pesar de que el resultado no fue el esperado por el peronismo, que esperaba afianzarse como la segunda fuerza más votada detrás del PRO, la asistencia al acto de dirigentes de primer nivel fue casi perfecta, con una notoria y presidencial excepción. Todos los precandidatos a suceder a CFK del espacio estuvieron presentes y hablaron con los medios (aunque Aníbal Fernández dejó el hotel antes de que comenzara el acto). El gobernador bonaerense Daniel Scioli y el ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, por primera vez en mucho tiempo compartieron un escenario sin que medie la presencia apaciguadora de CFK. Sentado entre ambos, el mandatario entrerriano Sergio Urribarri y un par de asientos más allá, el ministro de Defensa, Agustín Rossi, y el legislador Jorge Taiana.

También estuvieron los principales precandidatos a la gobernación bonaerense: sentados en segunda fila, detrás de los presidenciables, estaban el presidente de la Cámara de Diputados Julián Domínguez; el intendente de La Matanza, Fernando Espinoza; el de Berazategui, Patricio Mussi, el titular de la Anses, Diego Bossio; el viceministro de Desarrollo Social, Carlos Castagneto, y el secretario de Seguridad, Sergio Berni.

El vicepresidente Amado Boudou, el secretario de Legal y Técnica, Carlos Zannini, y el ministro de Salud, Daniel Gollán, completaban ese sector. Del otro lado del escenario, junto a los candidatos a la Legislatura, estuvieron los principales referentes de La Cámpora, Andrés Larroque, y el secretario general de Presidencia, Eduardo De Pedro, y el ministro de Economía Axel Kicillof.

Recalde, miembro de la mesa directiva de esa organización y a la vez presidente del Congreso Metropolitano del PJ, concluyó su discurso sosteniendo que "la única manera de vivir mejor es que gobierne la ciudad de Buenos Aires un proyecto con las características del proyecto nacional, que incluya a todos y gobierne con el corazón" en contraste con el manejo "inhumano" del PRO que "no tiene corazón para ocuparse de los porteños cansados de vivir en una ciudad tan desigual". En un último guiño convocó a todos "los que votaron hoy creyendo que la alternativa a ese candidato de Macri estaba en otro lugar, en otra lista que ya no va a participar". En ese voto reposa su esperanza de revertir el resultado de ayer y meterse en julio en el ballottage.


Su candidato no quedó habilitado

Un día negro para Massa

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En un día de reveses para el massismo, el precandidato del Frente Renovador en la Ciudad, Guillermo Nielsen (foto), alcanzó sólo el 0,9 por ciento de los votos y fue el primero en reconocer la derrota. "Esta elección tiene implicancias nacionales y respalda el liderazgo de Macri, porque su delfín (por Horacio Rodríguez Larreta) es el ganador", dijo el economista minutos después de las 19, cuando los números que circulaban no eran más que tendencias. Sergio Massa no acompañó a su precandidato a votar y tampoco se hizo presente en el bunker, pero Nielsen aseguró que no sintió que le haya "soltado la mano", al tiempo que señaló que un mal resultado "no perjudica" al tigrense en su carrera presidencial.

Nielsen, que se presentó en las PASO porteñas como precandidato único del Frente Renovador, no fue la primera opción de Sergio Massa para competir por la Jefatura de Gobierno porteño, sino la alternativa con la que debió conformarse luego de varios intentos fallidos por convencer a otras figuras para que encabecen su propuesta. Ayer se confirmó lo que ya se sospechaba, cuando Nielsen obtuvo una elección muy por debajo de las expectativas del líder del Frente Renovador a nivel nacional: alcanzó sólo el 0,9 por ciento de los votos, no logrando superar el piso mínimo del 1,5 y quedando fuera de las elecciones generales de julio. Ya desde temprano el precandidato vislumbró la flaca cosecha y mientras esperaba los resultados junto a su equipo, en Avenida de Mayo al 600, aseguró que estaban "cortando clavos". Pese al mal pronóstico electoral, en el bunker se prendieron brasas y hubo buena cantidad de asado y choripanes, lo que motivó bromas y menciones en las redes sociales.

El economista relativizó su derrota al afirmar que hubo "muchísimas operaciones" a través de las redes sociales que anunciaban infundadamente la baja de su candidatura, que "fue una campaña muy rara" y que "muchos votantes de Massa se enroscaron en la interna del PRO". De todos modos, aseguró que un mal resultado "no perjudica las posibilidades de Massa" de cara a las elecciones presidenciales. "Sergio (Massa) está dando pasos muy concretos y sólidos en Santa Fe, Salta y Córdoba, donde acordó una alianza con el gobernador (José Manuel) De la Sota. Falta mucho y mañana vamos a seguir trabajando por su candidatura", agregó.

Ayer por la mañana Nielsen se presentó a votar en una escuela de Belgrano acompañado por el primer candidato a legislador, Diego Kravetz. El economista justificó la ausencia de Massa alegando que el líder del Frente Renovador se encontraba junto a su candidato a gobernador en Neuquén, Horacio "Pechi" Quiroga, en lo que fueron las primeras elecciones generales del país. Sin embargo, el obstáculo de las cenizas se sumó a los también magros resultados cosechados por Quiroga –que quedó en un relegado tercer puesto– y Massa, que se preparaba para volar al Sur, canceló el viaje, faltando a ambas citas.


A PESAR DEL ALUVIÓN DERECHISTA (NO SÓLO EL DEL MACRISMO) LA IZQUIERDA ELECTORAL TAMBIÉN CRECIÓ

El FIT y Luis Zamora fueron los únicos que quedaron habilitados para competir

La izquierda quedó con dos candidatos

La barrera del 1,5 por ciento de los votos pudo ser superada por el Frente de Izquierda, que lleva a Myriam Bregman como candidata a jefa de Gobierno, y Autodeterminación y Libertad, con Luis Zamora, que volvió a mostrar la fidelidad de sus seguidores.

Por Laura Vales
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Myriam Bregman y Luis Zamora serán los únicos candidatos de izquierda entre los cinco partidos que irán a la elección general.

El Frente de Izquierda superó el piso electoral y sus candidatos porteños quedaron habilitados para competir en los comicios del próximo 5 de julio. La barrera del 1,5 de los votos también fue superada por Luis Zamora, que casi sin pegar un afiche de Autodeterminación y Libertad volvió a mostrar que tiene sus seguidores fieles en la Ciudad y anoche entraba con un 2 por ciento a la elección general. Aunque al cierre de esta edición el recuento no había finalizado, estaba claro que el resto de las fuerzas de izquierda quedaron fuera de carrera.

La lista encabezada por Myriam Bregman, como candidata a jefa de Gobierno, y Marcelo Ramal como primer legislador obtuvo cerca de un punto más del mínimo que fijó la ley para participar en los comicios.

"Nos consolidamos en la ciudad de Buenos Aires y también como fuerza nacional", festejó Bregman a las 9 y media de la noche en el Hotel Bauen, donde los dirigentes del trotskismo hicieron el conteo de los datos acercados por sus fiscales, aliviados con los resultados pero llenándose lentamente de veneno por las coberturas de la televisión, que no los tenían en cuenta ni para los zócalos. "Duplicamos los votos del candidato de (Sergio) Massa y nadie dice nada", se indignaban a medida que pasaban las horas en el salón del hotel recuperado. Allí Bregman dio una conferencia de prensa junto a Ramal y otros dirigentes de su espacio.

Aunque en el cuarto lugar de las PASO, el FIT quedó dieciséis puntos por debajo de la tercera fuerza, el Frente para la Victoria, y a casi 20 del ECO de Lousteau. De todas maneras, sus referentes mostraban expectativas de subir en julio este número. "Las colectoras del macrismo y el kirchnerismo y las colectoras de (Martín) Lousteau se van a desflecar. Esto es apenas un piso para una batalla que empieza ahora y que terminará en las elecciones generales de la ciudad", aseguró en este sentido el fundador del PO, Jorge Altamira. El cálculo que hacían en el FIT es que para conseguir ganar un legislador, el 5 de julio deberán alcanzar por lo menos un 3 por ciento de los votos.

La coalición del Partido Obrero (PO), el Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS) y la Izquierda Socialista llevó una lista única a las PASO, lo que le dio un mejor perfil que otras opciones de la izquierda para atraer votos. Los tres partidos vienen presentándose juntos desde el 2011, logrando así presencia legislativa: en el Congreso Nacional ocupan tres bancas –ninguno de esos diputados es de Capital, pero le dan mayor visibilidad al FIT ante los votantes de la Ciudad–, y tienen un legislador porteño. La apuesta de los trotskistas es a sostener ese caudal en las elecciones de este año, sumando bancas en la Legislatura y en las juntas comunales.

Luis Zamora tuvo nuevamente un desempeño electoral que sorprendió en relación al tamaño de su campaña. Con la lista "Caminamos preguntando", consiguió el 2 por ciento de los votos y así se ubicó entre las cinco opciones que competirán por la jefatura de gobierno porteña. El referente de Autodeterminación y Libertad agradeció a sus electores y en su primera declaración tras confirmar su ingreso a la carrera sostuvo que "en los temas importantes, el PRO gobierna desde hace ocho años con los votos del kirchnerismo y del sector de (Martín) Lousteau".

Por debajo del piso electoral quedaron los candidatos a jefe de Gobierno de otras cinco fuerzas de la izquierda: el MST, el Nuevo Mas, Gustavo Vera (de Bien Común) y dos aliados del kirchnerismo que fueron por afuera del FPV, con boleta propia: Pablo Ferreyra (ALBA, integrada por el Partido Comunista y Seamos Libres) y el Partido Humanista.

Por el Movimiento Socialista de los Trabajadores-Nueva Izquierda se midieron cuatro candidatos, el actor Héctor Bidonde, el dirigente sindical Sergio García, de la Central de Trabajadores de la Argentina, la comunera Maru López y el docente Martín Torres. El corte de boleta favoreció levemente al precandidato a legislador Alejandro Bodart, que al cierre de esta edición arañaba el mínimo, con un 1,13 por ciento.

El legislador porteño Gustavo Vera, integrante de La Alameda y conocido por el gran público por su relación con Jorge Bergoglio, también quedó anclado por debajo de un punto, logrando apenas tres mil votos más que la candidatura del actor Ivo Cutzarida.

Incluso por debajo quedó el Nuevo Mas, que llevaba como postulante a jefa de Gobierno a Manuela Castañeira –la más joven de los candidatos, de 30 años–. Tampoco superaron el 1,5 los precandidatos del Partido Humanista, Gustavo Tenaglia, y Alternativa Buenos Aires de Pablo Ferreyra.

Bregman: "El FIT se consolida como cuarta fuerza en la Ciudad"

26 abr
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Desde el Hotel Bauen donde se reunió la militancia y los candidatos del Frente de Izquierda en la Ciudad, Myriam Bregman, candidata a jefa de Gobierno porteño, anunció que el FIT se consolida como cuarta fuerza porteña y que ya se encuentra en las generales de julio de este año. Bregman, acompañada por Marcelo Ramal, Patricio del Corro y José Castillo, destacó la importante elección del Frente no solo en la Ciudad de Buenos Aires, sino también en la provincia de Neuquén al señalar que "algo que nos caracteriza es que somos una fuerza nacional, y esto se demuestra también en la excelente elección que estamos realizando hoy en Neuquén, donde la lista del FIT, que lleva como candidato a diputado a mi compañero Raúl Godoy, del PTS y obrero de la emblemática fábrica Zanon, está logrando una banca y peleando una segunda. También lo demuestra la excelente elección que venimos de realizar en Mendoza y en Salta, donde nos constituimos como tercera fuerza en ambas provincias".
Bregman denunció también "el carácter proscriptivo de las elecciones en la Ciudad, que no solo estipulan un piso de votos, sino que no hubo ningún espacio de publicidad en los medios masivos de comunicación, mientras el PRO y el FpV contaron con recursos millonarios. El PRO se garantizó dos millones de pesos diarios para publicidad para confundir sus colores con los de la Ciudad", agregó la candidata a jefa de Gobierno.
Bregman finalizó saludando el enorme esfuerzo de la militancia del FIT que colmó el Hotel Bauen y que permitió consolidar al Frente como cuarta fuerza en la Ciudad y estar en las generales de julio.

En un lento escrutinio, el FIT retiene su banca y pelea por otro lugar en la Legislatura


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En un escrutinio que avanza lentamente, el Frente de Izquierda y de los Trabajadores retiene su banca en la Legislatura de Neuquén, y se mantiene en carrera en la disputa por una segunda banca.

Raúl Godoy, exdiputado provincial del FIT y actual candidato a primer diputado aseguró esta noche a la prensa que la izquierda, según los datos aportados por los propios fiscales, mantiene su banca en la Legislatura de Neuquén, y se mantiene expectante ante la posibilidad de conseguir un segundo diputado. Godoy aseguró que "aún con gran cantidad de colectoras del MPN y el kirchnerismo, el Frente de Izquierda está haciendo una muy buena elección, lo que nos permite mantener a esta hora la expectativa de ver si conseguimos ampliar la representación de la izquierda en la Legislatura. Pero más allá de esto, ya podemos asegurar que hicimos una muy buena elección y somos uno de los ganadores de esta jornada".

Según los datos oficiales, el MPN se impone sobre el candidato kirchnerista Ramón Rioseco, aunque aún faltan escrutar gran cantidad de mesas, cargando sólo las mesas del interior para dar una idea de que se impondrían por un amplio margen.

fuente: La Izquierda Diario
SurGen no superó las primarias

Fuera de carrera

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Lejos de sus ex aliados de Unen, el frente SurGen –compuesto por el GEN, Proyecto Sur, Libres del Sur y otros espacios de centroizquierda– obtuvo el 0,45 de los votos en las PASO y quedó fuera de carrera. En cuanto a la interna dirimida entre los dos precandidatos a jefe de Gobierno porteño, Sergio Abrevaya, quien fue respaldado a lo largo de su campaña por la precandidata presidencial Margarita Stolbizer, aventajó al secretario general de Libres del Sur, Humberto Tumini (foto), con el 52 por ciento de los votos.

En el primer piso del hotel Uno, los precandidatos a jefe de Gobierno porteño de SurGen esperaron ansiosamente los resultados junto a los precandidatos a legisladores y otros referentes de las fuerzas que conforman el frente, como Victoria Donda, Julio Raffo y Jorge Ceballos. Las expectativas estuvieron orientadas desde el principio a alcanzar el piso del 1,5 por ciento de los votos y obtener la llave de entrada a las elecciones generales del 5 de julio, lo que finalmente no ocurrió.

Tumini arribó al bunker céntrico pasadas las 19.30, pocos minutos después que su adversario interno. Mate en mano, recibió de sus colaboradores la información enviada por fiscales en las pocas mesas testigo que ubicó el espacio. Reacio a hablar antes de contar con números precisos, siguió también desde el hotel las elecciones generales en Neuquén, donde el referente provincial de Libres del Sur, Jesús Escobar, encabezó una lista colectora del kirchnerismo como candidato a diputado.

Tumini, quien se presentó a elecciones acompañado por Laura González Velazco como primera legisladora, fue uno de los primeros precandidatos en presentarse a votar: llegó pasadas las 8.30 de la mañana a la escuela Normal Estanislao Zeballos, en el barrio de Caballito. "Soy muy optimista, ya que las ideas progresistas son muy fuertes en la Ciudad de Buenos Aires", dijo el precandidato luego de sufragar. El secretario general de Libres del Sur estuvo activo en las redes sociales y hasta se permitió aflojar la tensión de un día de definiciones con una broma que se replicó en portales y redes sociales. "Rumbo a mi casa acompañado de Madonna que vino de EE.UU. a darme apoyo. Ah, no, era mi secretaria de prensa", escribió en Twitter, acompañando la leyenda con una foto en la que se lo ve caminando junto a una mujer de furioso pelo fucsia.

Por su parte, el candidato de Stolbizer, que llevó a Juan Manuel Lugones como primer precandidato a legislador, se presentó ayer a la mañana en la Facultad de Ingeniería, donde pidió a los ciudadanos que "voten por las convicciones" y que no hagan "voto útil". "El único voto que sirve es el que representa realmente al votante", remató. Abrevaya dijo estar "muy contento" porque su candidatura es "la coronación de un trabajo de muchos años en la ciudad".


 

Neuquén: protesta mapuche impide el paso de urnas

Integrantes de esa comunidad realizaron un piquete en reclamo de ayuda para mitigar la sequía que afecta la zona.  

Neuquén vivio una jornada electoral especial, en medio de la conmoción por la erupción del volcán y la lluvia de cenizas. A pesar de los inconvenientes y de las denuncias cruzadas de los candidatos, los comicios se desarrollaban con relativa normalidad, hasta que una protesta obligó a cambiar la locación de una de las mesas.

Un piquete organizado por miembros de la comunidad mapuche impidió el paso de urnas en una zona cercana a la ciudad neuquina de Junín de los Andes. Por eso, las autoridades decidieron trasladar una mesa electoral de una localidad a otra.

El reclamo fue realizado por pobladores del paraje Chiquilihuín, a 55 kilómetros de Junín de los Andes, quienes obstruyeron el acceso de las urnas a la Escuela rural 222, en protesta por falta de ayuda oficial para paliar la sequía que afecta la zona.

En ese contexto, la Junta Electoral Provincial dispuso trasladar la mesa 1302, perteneciente a Chiquilihuin, a la Escuela N° 259 de la localidad de Atreuco.


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